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Ensayos sobre lo Principio/Curso Corto de los Fundamentos de la Meditación

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Curso Corto de los Fundamentos de la Meditación

Antes de comenzar a dominar las prácticas de meditación, es necesario comprender su propósito.

Si esto no es hecho, un fenómeno peligroso se da cuando entonces las personas se involucran en cualquier sin sentido ofrecido por sus líderes teniendo el hermoso y tentador nombre de «meditación».

Por ejemplo, puede tratarse de un intento de salir del cuerpo a través del chakra craneal sahasrara. Porque justo ahí, dicen ellos, encontramos a Dios.

Peor aún, cuando la meta es obtener un grosero «poder personal» para dominar a los demás, —con el dominio de la mirada desde el chakra ajna a través del punto entre las cejas—.

Y lo que es peor, —cuando estos buscan «poder personal» en la capa negra más externa de la multidimensionalidad, que es el infierno—, la «oscuridad exterior» en relación con el Creador y la parte productiva de Su Creación.

Tales personas —cuando están encarnadas— se vuelven diablos en la carne. Y estos dañan intensamente —por sus campos de energía grosera— a las personas y otros seres encarnados. Se condenan a sí mismos —después de desencarnar— a permanecer en el infierno. Ellos son el desperdicio de la Evolución de la Conciencia Universal…

Desafortunadamente, la mayoría de las personas que se consideran religiosas, tienden a no «llegar» a la cognición de Dios, sino a «allegarse» sólo a personas de ideas afines y al dulce sentimiento de su participación en el «movimiento espiritual», el cual, —de hecho— puede ser la actividad de sectas criminales destructivas.

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Pero el verdadero objetivo de los esfuerzos espirituales debe ser la cognición de Dios y el logro —como resultado de la encarnación presente— del estado de Espíritu Santo, o al menos, el progreso máximo en el desarrollo personal hacia esta Meta.

El significado de nuestras vidas terrenales consiste precisamente en esto: debemos ponernos a prueba, —a través de la participación en muchos eventos terrenales—, los cuales nos desarrollan y son ofrecidos por Dios. También, la realización de esfuerzos espirituales plenamente percibidos, —para desarrollarnos a nosotros mismos hasta la Perfección— y fusionarnos con la Conciencia Primordial, enriqueciéndola así.

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Entonces, primero tenemos que entender lo que Dios es, dónde debe ser buscado, qué quiere Él que seamos, a qué tiene sentido dedicar nuestras vidas en la Tierra.

Se pueden encontrar más detalles sobre esto en todos nuestros y otros libros mencionados en la lista de literatura recomendada.

En estos mismos libros, hemos discutido repetidamente el tema de la destrucción del yo (egocentrismo, la primacía del «yo inferior»).

Lo opuesto al yo es la humildad, que es la vida sin un perversamente desarrollado yo egocéntrico.

¿Por qué es esto necesario?

Tal «yo» no nos permite tomar al Creador lo suficientemente en serio como nuestro Maestro principal, aprender directamente de Él, acercarnos a Él por el alma, fundirnos con Él al final del Camino.

La impecabilidad ética debería ser la base para el mayor crecimiento del hombre. De lo contrario, una caída es inevitable para los indignos: con esto, Dios les detiene en el camino hacia Él.

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Y más allá —comienzan los pasos del crecimiento meditativo—.

Primero, necesitamos limpiar la energía del cuerpo. Energías groseras y oscuras deben eliminarse del cuerpo y del «capullo» bioenergético circundante. De esta manera, al mismo tiempo nos limpiamos de muchas enfermedades. Pero lo principal es que solo con la pureza transparente del cuerpo podemos percibir completamente a Dios.

Sí, si purificamos nuestros chakras y los meridianos principales, entonces nosotros —con almas y cuerpos— gradualmente nos volveremos transparentes para la clarividencia. Y esto hace que sea fácil fundirse con la dicha del paraíso, y luego con los Espíritus Santos y el Creador.

Las estructuras de energía de nuestros cuerpos están representadas por chakras y meridianos. Más aún, los grupos de chakras purificados necesitarán ser consistentemente combinados en dantyans* y luego en «burbujas de percepción». Todo esto se vuelve necesario en las etapas apropiadas de superación personal —los métodos de meditación se vuelven más complicados para dominar gradualmente esto—. (Más sobre esto es dicho en el libro «Ecopsicología»).

El principal de todos los chakras es el anahata, localizado en el pecho en el área de los pulmones. Es en este chakra donde nacen las emociones de amor del corazón. Debemos aprender a permanecer en este chakra, como en nuestra morada, como en una habitación luminosa. Y —mirar desde ahí— el espacio circundante por delante del cuerpo. Es de lo más conveniente hacer esta práctica en las riberas de grandes embalses —siendo lo mejor de todo, en playas o bajíos— o en cimas de montañas sin abundante vegetación, porque las bioenergías vegetativas pueden interferir en la percepción de formas mucho más sutiles de la vida no encarnada.

Tales entrenamientos durante meses (con un clima cálido despejado y sin viento fuerte) hacen posible aprender a llenar de conciencia (en otras palabras, con el alma desarrollada, consistente principalmente del corazón espiritual y nombrado como buddhi) todo el espacio visible —a lo largo y a lo ancho—.

El corazón espiritual debe tener manos no materiales. Con estas manos de amor, acariciamos toda la vida que nos rodea —por todas partes, donde sea que lleguemos— a miles de kilómetros y más. Sostenemos las palmas del amor, llenando de amor tierno, afecto —seres encarnados y no encarnados—.

Entonces aprendemos a mirar desde ahí —desde la distancia— hacia nuestros cuerpos. El centro de uno mismo se desplaza ahí. Por lo tanto, en nuestra propia práctica, todos estamos convencidos de que yo puedo existir plenamente sin un cuerpo. Ahora, si el cuerpo está muerto, ¡yo —sigo estando—! ¡La muerte del cuerpo ya no es terrible, ya no asusta! Es solo una transición a un estado sin cuerpo con una conciencia completa (¡ahora!) de mí mismo, con la preservación de la memoria, la capacidad de pensar y comunicarse de diversas maneras con otros seres no encarnados.

Entonces será necesario dominar todo lo mismo —detrás del cuerpo—. (Enfatizo que en este caso es necesario salir del chakra anahata en la dirección hacia atrás y abajo).

Rotemos el cuerpo hacia el espacio abierto —y dominaremos los estados mencionados—. Es decir, detrás del cuerpo, todos pueden tener la habilidad de ver a los Espíritus Santos y comunicarse con Ellos. De esta manera, adquirimos una percepción completamente clara de los Maestros Divinos no encarnados. ¡Y ahí están las Incontables Veintenas de Ellos!

¿Por qué es mejor percibir el espacio abierto detrás de nuestros cuerpos para esto?

Para hacerlo corto, nosotros, mirando hacia adelante, estamos acostumbrados a mirar el mundo de la materia; pero detrás del cuerpo, el espacio no está «abarrotado» con imágenes de objetos materiales.

Y luego, aprendiendo de los Espíritus Santos, sintonizando con Ellos, abrazándoles, fusionándonos con Sus más sutiles y delicadas Formas Gigantes (Mahadobles), gradualmente aprendemos a ser como son Ellos.

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Pero también tenemos que aprender a cómo disolvernos —todavía no como cuerpos, sino como conciencias—.

Hay técnicas meditativas especiales para aprender a disolverse uno mismo en los estados superiores, —por el bien de la subsecuente Unión con el Creador—.

Por ejemplo, al principio, los entrenamientos serán útiles para disolverse con la armonía de la naturaleza circundante. «¡Solo hay un bosque (un lago, un río, una estepa, etc.) empapado con la dicha, y yo no estoy!» Esta pérdida temporal de autoconciencia significa que estoy fundido con la dicha del paraíso, estoy volviéndome eso.

Podemos acelerar el dominio de esta tarea. Esta es la «reciprocidad total», que se describe en detalle en nuestros libros y filmaciones.

Dominando lo anterior luego nos permitirá fusionarnos fácilmente con el Unido Nosotros de los Espíritus Santos.

… Como resultado de este trabajo, logramos, entre otras capacidades, un estado en el cual la materia de cualquier objeto y del planeta como un todo —se vuelve fácilmente permeable para la conciencia—. Y podemos fácilmente cambiar la percepción ya sea en el mundo de la materia —o en el mundo de los Espíritus Santos y la Calma del Creador—.

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Todo lo que se ha dicho debe ser combinado con la tendencia a sutilizar la conciencia.

¿Qué es esto?

El Absoluto es realmente multidimensional. Pero Sus dimensiones espaciales no son símbolos matemáticos, sino las capas reales del espacio, difiriendo en el nivel de sutileza-grosería.

Podemos hablar de vectores de multidimensionalidad, atravesando a través de todas estas capas. En un extremo del vector, está la Conciencia Primordial (el Creador). Y el otro extremo va al infierno.

Y ahora cada uno de nosotros, teniendo los apropiados conocimientos teóricos y las técnicas prácticas, tenemos la oportunidad de elegir para cada uno, esa capa del Absoluto a la que más nos parecemos —en vías de establecernos en ella—.

Personalmente para mí, desde que encontré el conocimiento religioso, la Morada del Creador fue siempre atractiva. Y el Creador me llevó hasta ahí.

Pero hay personas quienes voluntariamente corren hacia el infierno. Son víctimas o de la ignorancia religiosa o del engaño, o esta ruta es su bastante consciente elección, —la elección de aquellos quienes han llegado a las encarnaciones del presente desde el infierno—, a las cuales están tan acostumbrados que no imaginan una vida diferente para ellos mismos.

Un ejemplo típico de esto último es la actividad voluntaria en la «capital del norte» de Rusia, —del terror mencionado en el ensayo previo (la palabra terror significa intimidación)— de la oculta pandilla anticristiana, donde, entre otras cosas, la demonización de adeptos fue enseñada activamente.

… Entonces, en vías de acercarse al Creador, uno debe, por el contrario, volverse como Él en el nivel de sutileza.

Esto es logrado, en primer lugar, a través de alejarse de las condiciones ambientales groseras.

Podemos recordar a este respecto el mandamiento de Pablo el Apóstol: «… ¡Apartaos del mal, aferraos al bien!» (Romanos 12:9).

En segundo lugar, sintonización de la conciencia tanto con la armonía de la naturaleza como con los seres encarnados armoniosos, personas tales incluidas; también, será favorecedor, sintonizar con las correspondientes obras de diferentes tendencias artísticas. Muy importante para esto son las relaciones sexuales armoniosas y el erotismo en el arte.

Y luego, —sintonizamos con los Espíritus Santos y la Conciencia Primordial—.

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Noto que las etapas de dominar el arte de la meditación, discutidas en este ensayo, son solo la parte principal del programa completo de entrenamiento ofrecido a los discípulos dignos por Dios. Por ejemplo, solo mencioné casualmente el sistema de autorregulación psíquica que fue desarrollado por mí (ver en «Ecopsicología»), no hablé aquí sobre el trabajo con la Kundalini, con los segmentos, con la «órbita macrocósmica», con la exploración de eones (lokas) de protoprakriti y protopurusha, sobre la disolución de uno mismo en el Descanso del Creador en Su Morada.

Este ensayo presenta un programa mínimo simplificado, suficiente, aunque sin embargo, para el logro rápido y seguro de la Meta designada.

Esta rama del trabajo espiritual en Europa generalmente se llama hesicasmo, —de la palabra griega hesychia: silencio interno, paz interior—. La práctica del Hesicasmo implica el trabajo en el desarrollo de uno mismo como el corazón espiritual, donde —en las profundidades multidimensionales del cual, conocemos a Dios—.

El Hesicasmo es la rama principal —en orden de importancia— de la iglesia ortodoxa rusa.

Nuestros logros son el desarrollo posterior de la metodología de esta antigua rama del trabajo espiritual. Lo hemos enriquecido sustancialmente con el conocimiento científico y hemos aumentado su efectividad.

Pero la palabra hesicasmo tiene origen europeo. Mientras que las escuelas espirituales de los Atlantes, del antiguo Egipcio, Pitágoras, taoístas, hindúes, budistas, musulmanes, rusas antiguas y otras tendencias religiosas, trabajaron en la misma dirección desde tiempos muy antiguos.

Recordemos que todos tenemos un Dios, Quien llena con Él Mismo todo el espacio del universo. Y Sus Enseñanzas son una para todas las personas de nuestro planeta y de todos los demás planetas en el universo.

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Cualquier actividad humana, dirigida al propio desarrollo y al beneficio de otros seres, puede sernos de ayuda para perfeccionarnos.

Pueden ser estos: trabajo físico, actividad intelectual, el nacimiento y crianza de los niños, y varias opciones para el refinamiento de la esfera emocional. Todos ellos son útiles y serán útiles si seguimos escrupulosamente los principios de la ética de Dios.

Pero el logro de a saber, las alturas de la Perfección espiritual es posible solo a través del trabajo delineado sobre uno mismo como el corazón espiritual. No hay otras posibilidades para tomar las alturas espirituales.

Esto no es una «invención» del autor: precisamente esto mismo fue enseñado por todos los Fundadores de las ramas religiosas verdaderas, que se puede leer en los libros: «Clásicos de la Filosofía Espiritual y el Presente», «Ecopsicología», y otros.

¿Qué nos impide aprender esto?