Enseñanzas de Dios para el logro de la Perfección espiritual/Prefacio

Prefacio

«¡Buscad el Reino de Dios!» (Lucas 12:22-34). Estas son palabras de Jesús el Cristo que han sido leídas por muchas personas familiarizadas con el Nuevo Testamento. Pero, ¿realmente son muchos quienes fueron inspirados por este Mandamiento de Dios a aspirar a los logros espirituales? No. ¿Por qué?

Solo unas pocas personas entienden que el Reino de Dios, en este contexto, es la Morada del Creador (la Conciencia Primordial, Dios-Padre, Tao, Ishvará, Alá). ¿Y qué es, Él —el Creador—? ¿Y dónde encontrarle?

Tales concepciones ingenuas y falsas sobre el Creador como por ejemplo que es un anciano en una nube, ¡niegan la posibilidad misma del conocimiento real de Dios!

¡Pero Él —por el contrario— es Universal, Infinito en tamaño! Él realmente es Akbar, es decir, ¡Infinitamente Gigantesco! ¡Y Jesús el Cristo enseñó acerca de esta percepción de Dios [16]! Pero los líderes de algunas sectas religiosas, incapaces de acomodar sus pequeñas mentes a la Grandeza Universal de Dios, degradaron Su visión al primitivismo y al nivel de cuentos de hadas para niños [6,19].

Pero buscar al Creador implica necesariamente hacerlo en las profundidades del Absoluto multidimensional a través de: a) el desarrollo de uno mismo como corazón espiritual y b) mediante el conocimiento de esas profundidades dentro de los espacios de apertura en el corazón espiritual desarrollado. ¡No existen otras formas para la cognición directa de Dios!

¿Por qué, por cierto, el concepto monoteísta es metodológicamente importante? Es porque Dios debe ser explorado precisamente como el Organismo Multidimensional (Absoluto) Único en tamaño Universal que incluye al Creador y Su Creación. ¡Y no es solo una hipótesis o una imaginación intelectual! ¡Es la realidad empíricamente reconocible y reconocida!

Este es el enfoque que favorece el estudio de Su anatomía multidimensional [13,16], incluida la búsqueda práctica de la Conciencia Primordial en las profundidades más sutiles del espacio multidimensional.

Hemos de notar, para una mejor comprensión de lo que se dirá más adelante, que la mayoría de las veces cuando se habla o se escribe la palabra Dios, no se entiende el concepto del Absoluto, sino más bien del Creador o Sus Representantes concretos, sean el Mesías, el Cristo, el Avatar (tres palabras que nos han llegado de diferentes idiomas, pero que tienen idéntico valor).

Tuve la oportunidad —bajo la guía de los Espíritus Santos, Quienes son nuestros Maestros Divinos— de crear muchos libros y video conferencias, hablando sobre Dios, el significado de nuestras vidas y el correcto desarrollo de estas [2-20 etc.] Redacté entonces el siguiente libro —a pedido de Dios— en vías de explicar esto en forma lacónica y resumir todo lo dicho anteriormente.