«Burbujas de percepción»/Sobre el trabajo con los chakras

Sobre el trabajo con los chakras

No hay chakras «malos» y chakras «buenos». Todos los chakras deben ser limpiados y desarrollados. Cada uno de ellos es importante.

Con todo, los chakras de una persona concreta pueden estar sucios literalmente, y no sólo en sentido figurado. A saber, éstos pueden estar contaminados por energías groseras y patógenas o pueden estar simplemente poco desarrollados. También pueden estar desfigurados como consecuencia de la práctica de métodos erróneos de trabajo con los chakras. Algunos ejemplos de tales métodos incluyen el colorear los chakras según los colores del arco iris o el desarrollo de las cualidades groseras en los chakras cuando el practicante no presta la debida atención a la pureza de sus pensamientos y emociones, así como a su nutrición.

Los chakras deben brillar con una tierna luz blanca o dorada y llenar completamente las secciones respectivas del cuerpo. Sólo con los chakras en tal estado podemos alegrar a los Espíritus Santos, Quienes tratan de ayudarnos. Sólo a partir de tal estado podemos prepararnos para aprender a percibirlos, y entonces Ellos se convertirán en nuestros Maestros Divinos directos.

Además, es fundamental obtener la tranquilidad (o calma) de la conciencia. Pues sólo en este estado podemos aprender a salir fuera de los límites del mundo material. Esta calma puede obtenerse sólo en las profundidades del propio corazón espiritual.

Hemos hablado bastante en otros materiales nuestros [5,9,29 y otros] sobre las funciones de los chakras y sobre su papel en la formación de uno u otro estado del alma (y esto, entre otras cosas, es lo que predeterminará nuestro estado «póstumo»). Por eso ahora solamente quiero destacar que los practicantes deben ser bien orientados en los temas de la filosofía espiritual [8] y de la purificación ética [2,7-9,12,14-16,17-26,29-30]. Es más, es deseable que estos dos componentes del desarrollo espiritual sean asimilados antes de que el practicante empiece el trabajo psicoenergético serio. Es inadmisible enseñar los métodos psicoenergéticos a las personas que son ignorantes en la filosofía espiritual y que no han hecho los esfuerzos debidos para su purificación y formación ética, porque esto puede provocar el reforzamiento de los defectos (imperfecciones) que estas personas no han eliminado en ellas todavía.